Echo de menos las canciones, los tarareos en horario de oficina, los cafés con temas escabrosos y los cigarros debajo de la cornisa... Echo de menos a tu perro, las pipas y verte venir de lejos... Echo de menos saber que si ando 5 minutos y toco en el 4-1-4 me siento en tú sillón, aunque no lo haga casi nunca... Echo de menos comer contigo mientras me cuentas para que has venido hoy y echo de menos los martes de cine, los jueves de cantautor y los viernes de mus...
Cambiar el lugar entraba en mis planes como posibilidad a tener en cuenta, ahora que lo tengo y que me lo dieron sin pedir ya no cabe, no lo quiero, quiero estar donde antes, a 10 minutos de lo que te pase y a 5 esquinas de cruzarme contigo. En el lugar donde hicimos nuestros planes de invierno para descansar del verano, en el sitio que me he fabricado durante estos años sin tejado fijo ni sueños irrealizables...
Y así, aún sabiendo que lo que tengo no es para siempre y que nuestros caminos se separarán más pronto que tarde quiero quedarme hasta que os vayáis y ser quien os despida cuando decidáis que vuestro sitio no es el que ahora compartimos. Y entonces buscarme otro perro, otra cama de alquiler para los tiempos de crisis, y cuajarme otra vida sin vosotros cuando el lugar y el tiempo que compartimos ya no sea lo que os llene...
Salir estaba en mis planes,
pero ya no lo quiero,
que no cambio la playa
por espárragos en la Atalaya
3 comentarios:
Qué pu...faena!
Piensa que las cosas pasan por algo a ver si te ayuda.
Ojalá que los cambios te traigan aun más cosas buenas de las que ya has vivido. Que te abras para dejar que la vida vuelva a sorprenderte. Ojalá aprendiésemos pronto a decir adiós... y joder, cómo nos cuesta.
Besos. Varios. Muchos. Para que el inicio sea más llevadero. Mua
Los cambios son difíciles. Y la ausencia de algunas personas ni te cuento...
Dicen que todo pasa, y todo llega.
Un besazo!
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