Aquí acaba la historia, punto y final a la retransmisión, no hay nada que retransmitir así que de poco vale continuar... Gracias a todos los que pasasteis por aquí, a los que escribisteis y a los que no.

Esto tenía que ser una despedida emotiva, o divertida, o yo que sé, pero ni siquiera eso sale...

Quizá en otro momento, en otro lugar, con otro nombre, quién sabe...
Hasta Siempre.

jueves, 2 de septiembre de 2010

El Regalo

Pasa a veces que uno entiende lo que quiere, y pasa también que uno ve un regalo encima de la mesa del comedor y se hace ilusiones pensando que alguien lo ha dejado ahí para él...

Pasa que uno lo abre, ve lo que hay dentro y le gusta, acto seguido busca a quien lo dejó ahí, quiere darle las gracias, decirle que le encanta, que no se lo esperaba y que es feliz por recibir un regalo por sorpresa...

Y pasa lo que suele pasar, te taladra un "lo siento, no era para ti", que desilusión, uno vuelve a empaquetarlo con mucho cuidado, que no se note que alguien lo abrió...

Y aquí se cae todo, uno se dice que no volverá a dar nada por supuesto, que antes preguntará, todo está bien, no pasa nada, pero le hubiera gustado que fuera para él...

Pasa que uno se hace ilusiones y entiende lo que quiere, y entonces sigue caminando a buscar el próximo regalo, quizá el siguiente sí sea para él...

"Es buena idea ponerle el nombre a los paquetes de regalo, o mejor, es buena idea no abrir regalos sin nombre"

9 comentarios:

Verónica dijo...

Seguro que sí, y, además, tampoco esta tan mal, con todo, esa persona ha descubierto que es lo que puede regalarte la próxima ocasión ....

mi dijo...

Seguramente ese regalo sí era para él, pero al abrirlo no encontró exactamente lo que esperaba.

Zara dijo...

joe pues yo estoy cansada de abrir regalos que no son para mí, porque aunque siempre me digo que 'no volveré a dar nada por supuesto', cada vez que aparece un paquete me lanzo a romperle el envoltorio!

Anónimo dijo...

Bueno al menos viste el regalo antes que otra persona, es decir, te llevaste una primicia ajena, así puedes darte una idea qué clase de regalos hace la persona... pero si, a veces uno espera que sea para uno y da mucho corte y un pelín de desilusión; ante eso a veces da más ilusión dejar regalos en la mesa que no recibirlos por más extraño que parezca

Tesa dijo...

Recuerdo una escena de una película, en que una de las protas, descubre un estuchito con un collar en el bolsillo de la chaqueta de su marido. Ella piensa que es su regalo de Navidad y lo vuelve a dejar ahí disimulando en el momento en que se encuentran junto al abeto al día siguiente.
La cara de ella al ver que su regalo se ha convertido en un CD de su cantante favorito bien se merece el primer plano.

Nebroa dijo...

Es curioso. No me sale otro término. Como se nos despliegan las alas a veces ante cualquier gesto encontrado, no nos cuestionamos si es para nosotros, o para el de al lado, cuenta el momento preciso en el que sonreímos y nos creemos lo que queremos creer... Y después, después puede llegar el desastre, el desengaño o el desencanto, pero no consiste en lo mismo (casi) siempre esta vida?

Diferido dijo...

Verónica: Ahí llevas razón, ahora sabe que regalarme, aunque yo creo que ya lo sabía antes....

mi: mmm... Me temo que no, no era, de hecho creo que ni siquiera era un regalo.

Zara: Mira antes si tiene el nombre puesto!!

Zoe: Lo probaré, haré regalos yo por sorpresa. Incluso creo que me haré autoregalos!

Tesa: Jajajaja, No comment... Ya me dirás la película, buscaré esa escena.

Nebroa: Curioso, sí, pero real como la vida misma. No creo que todo sea igual en la vida, a veces abro regalos y sí que resultan ser para mi.. Lo único que he de hacer es ser más cauto.

Fiebre dijo...

Llegará tu regalo...yo al menos no pierdo la esperanza.

Aunque a veces no abro siquiera los que son míos. En fin (el que me entienda que me compre).

Diferido dijo...

Digo yo que llegará... Mientras tanto a seguir abriendo a diestro y siniestro... Y tú abre los tuyos mujer!